Empatizar con tus clientes es importante, pero enamorarlos con tus servicios es la nueva tendencia para garantizar relaciones de largo plazo.
Al conocer a tu cliente, desarrollas una capacidad de entendimiento que logra establecer una suerte de “conexión” única. Los clientes valorar a las empresas por los elementos que reciben relacionados al producto y servicio que consumen. Ante la gran variedad de oferentes en la actualidad, la diferenciación en la calidad de servicio postventa hace una diferencia tremenda.
Pero... ¿Qué aporta la tecnología en esta relación entre personas que trabajan en una empresa y personas que consumen sus productos y servicios?
Los principios de especialización del proceso administrativo garantizan la perfección de operaciones por medio de la estandarización de acciones. Tomando en cuenta este precepto, nada es más repetible, mejorable y medible que un proceso automatizado llevado a cabo por un sistema de atención al cliente. No sólo es la capacidad de repetir y mejorar las experiencias de nuestros usuarios, sino de perpetuar la comunicación con múltiples canales y habilitar información que de manera autónoma por medio de bots, bases de conocimiento y otras alternativas de autoatención permitan que nuestro sitio web opere de cierta manera apoyando a nuestros clientes durante las 24 horas del día.
¿Y cómo se logran replicar los factores humanos de atención y servicio en un sistema automatizado?
Los sistemas por sí solo no aportan nada "amor" por lo clientes; son las estrategias de servicio, los flujos de información, los procesos de resolución y las garantía de atención lo que cuentan. Los sistemas sólo son vehículos que optimizan el servicio y lo replican para ser consumido en diferentes canales de atención (teléfono, correo, chat, WhatsApp, etc)
El combinar de manera sinérgica las estrategias de servicio, las habilidades blandas de nuestros ejecutivos de atención y la organización, potencia e inteligencia de los sistemas de atención, permiten a nuestra empresa garantizar una experiencia homogénea a sus mercados, optimizando recursos y midiendo los resultados que permitan establecer retornos sobre su inversión en los presupuestos para la atención de clientes. Hagamos que nuestros clientes deseen nuestros productos o servicios, seamos esenciales en su vida con el buen uso de la tecnología.